Muchas personas, de forma errónea, piensan que con solo acudir de vez en cuando a un centro de procedimientos dermocosméticos a realizarse una limpieza del rostro, es suficiente para mantenerlo saludable. Lo cierto, es que esto no sirve de mucho si no se acostumbra a llevar buenos hábitos de cuidado y mantenimiento del rostro de forma diaria.
Si quieres lucir una piel saludable, luminosa y uniforme, es muy importante contar con una rutina diaria de limpieza del rostro, adecuada para tu tipo de piel. Esto último es especialmente fundamental tenerlo en cuenta, ya que el uso de los productos inadecuados podría causar un efecto igual o peor al que puede causar el hecho de no realizar una limpieza diaria del rostro.
¿Por qué es importante realizar una rutina diaria de limpieza del rostro?
El rostro es nuestra principal carta de presentación, no obstante, también se encuentra constantemente expuesta a diversos factores y agentes dañinos que la pueden afectar de forma negativa, como la contaminación ambiental, cambios hormonales, estrés, maquillaje, y, sobre todo, los rayos solares.
Además de esto, el proceso natural de regeneración de la piel produce gran cantidad de células muertas y, al no realizar una correcta limpieza del rostro, se dificulta su eliminación natural de la superficie de la piel, y ocasionan el taponamiento de los poros junto a otras impurezas, dando paso al bloqueo de la salida de la grasa. Todo esto produce puntos negros y acné.
Esta es la razón principal por lo que, tanto la limpieza del rostro como la exfoliación periódica son pasos fundamentales en una rutina de cuidado facial. Todo esto según nuestro tipo de piel y las recomendaciones de un dermatólogo, para utilizar productos que contengan los activos más beneficiosos para nuestro tipo de piel.
La limpieza del rostro no solo es importante porque mejora el aspecto general de la piel, sino que permite su adecuada oxigenación; permite la adecuada efectividad de los productos cosméticos, ya que se encuentra más receptiva a sus nutrientes y beneficios; permite un mejor aspecto del maquillaje en nuestra piel, al disminuir la aparición de imperfecciones y mejorando su textura.
Asimismo, dormir sin limpiar tu piel acelera la aparición del envejecimiento prematuro de la piel e incrementa el tiempo de exposición a contaminantes acumulados provocando la degradación de las proteínas que mantienen la óptima estructura de la piel, dando como resultado la aparición de líneas de expresión, resequedad, flacidez, espinillas y puntos negros. Además, mientras dormimos las células se renuevan, por lo que dejar los poros obstruidos durante ese período de tiempo dificulta ese proceso natural y agrava el acné.
Así que, si quieres mantener tu piel sana, es esencial invertir en productos de limpieza adecuados para tu tipo de piel, que promuevan su exfoliación.
LIMPIEZA DEL ROSTRO SEGÚN TU TIPO DE PIEL
1. Limpieza del rostro en piel grasa
Para los tipos de pieles grasas, una correcta limpieza facial es fundamental para evitar la proliferación de bacterias y la obstrucción de los poros agravada por el exceso de sebo, por lo que generalmente se recomienda realizarla tanto por la mañana como durante la noche antes de irse a dormir, evitando los productos que contengan aceites y que promuevan la aparición de comedones.
2. Limpieza del rostro en piel seca
Para la piel seca, es muy importante cuidar la piel manteniendo su correcta hidratación y humectación, con productos en crema, emulsión o a base de aceites, y que no contengan alcohol para evitar hipersensibilidad.
3. Limpieza del rostro en piel mixta
Para este tipo de piel es fundamental utilizar productos específicos que equilibren la limpieza en cada zona del rostro. Evitando los productos comedogénicos.
4. Limpieza del rostro en piel sensible
En este tipo de piel es importante ser muy cuidadoso al elegir los productos de limpieza y cuidado facial. Lo más recomendable es consultar con tu dermatólogo de confianza para conocer qué ingredientes y activos puede tolerar tu piel, según su nivel de sensibilidad. Se deben utilizar productos hipoalergénicos y evitar por completo los productos agresivos y que contengan alcohol, ya que esto puede generar irritación y enrojecimiento de la piel.
La Loción control grasa SOREL PLUS 2 es una solución dermocosmética que combina las propiedades seborreguladoras, antimicrobianas, antibacterianas, hidratantes y exfoliantes de la AZELOGLICINA, un normalizador que disminuye la excesiva producción de sebo o grasa en la glándula sebácea; y el ÁCIDO SALICÍLICO, un activo antibacteriano que evita el taponamiento de los poros, impidiendo la formación de espinillas, puntos negros y barros.
Gracias a estas propiedades, LIMPIA Y CONTROLA EL EXCESO DE GRASA EN LA PIEL y contribuye en el tratamiento del acné leve.
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